Bodegas y gastronomía
Gastronomía en las bodegas, una nueva posibilidad de disfrutar el turismo enológico.
Un poco sobre la historia del enoturismo
Francis Mallmann es el chef de alta gastronomía ligado al vino, de mayor reconocimiento. Hace más de diez años eligió Mendoza, Argentina para instalar su restaurante 1884 en Bodega Escorihuela. Desafortunadamente, tras la pandemia Mallmann confirmó que cerró su restaurante, el cual ya era un emblema del enoturismo.
En la década de los setenta, la familia Tittarelli, funda la Bodega Del 900… Invirtieron en cenas buffet con shows en 4 escenarios ¿Lo imaginais? Claro que esto atrajo a una gran cantidad de visitantes.
Gracias a estos visionarios cada vez son más las bodegas que apuestan por incorporar un restaurante en sus instalaciones, involucrar la gastronomía a su propuesta de experiencia.
Durante los años, este concepto ha ido evolucionando, tomando como referencia los intereses de los consumidores y las tendencias de mercado.
Qué se cuece en el mundo del vino, o se ¿madura?
Las tendencias globales que han estado muy presentes en este 2022:
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Maridaje: Cada vez más se buscan espacios donde se pueda integrar el vino como estrella del concepto. El vino como protagonista, motivo de inspiración para crear la oferta gastronómica y crear una experiencia culinaria completa. Se buscan platos para maridar un vino, no vinos para maridar los platos.
Cabe destacar la ciudad del vino de Marqués de Riscal, donde la vida gira en torno a la comida y al vino. La identidad gastronómica fue desarrollada por el chef Francis Paniego.
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Informalidad: Sin dress code. El vino está reduciendo su formalidad.
Vienen pisando fuerte los vinos naturales, desde la viña a la botella en el que se interviene lo mínimo posible. Autenticidad y prácticas sostenibles en el viñedo son clave.
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Vino y arte, especial cuidado en el packaging.
Cambiamos cristal por aluminio, la moda del vino en lata ha venido para quedarse y ya ha conquistado las bodegas españolas. Barokes es el inventor del patentado sistema de embalaje de vinos Vinsafe, que permite enlatar “vino de primera calidad con estabilidad y longevidad”. También mencionar las etiquetas irreverentes, packaging como elemento innovador. Tenemos a Bodegas Arráez como un claro ejemplo de esta tendencia.
Solo vemos latas y etiquetas con un diseño extremadamente cuidado, con un estilo desenfadado, moderno y singular.
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Hiperlocal / Km0: Esta no es una tencencia nueva, es algo que lleva ya muchas generaciones y estamos readoptando. La responsabilidad social va más allá de la parte ecológica, se centra en ayudar a la comunidad. Que lo local esté presente en la materia prima y también en otras áreas del negocio, como en el arte, la arquitectura y el menaje de sala.
Como ejemplo tenemos la Gastrobodega de Martín Barasategui que apuesta por una experiencia sensorial gastronómica con productos locales y materias primas de KM0.¡Es la primera gastrobodega mundial! ¡Digna de orgullo nacional!
Conclusión
El vino es un placer que puede ser cotidiano y así lo ven las nuevas generaciones. Quieren vivir el presente, sin formalidades y de manera consciente, respetando el producto y el planeta. Este año se ha fortalecido la sinergia entre vino y comida, siendo el vino un factor mucho más influencial en la creación de conceptos. ¿Cuáles serán las nuevas tendencias en 2023?
